Hoy nos gustaría retomar el tema del Marco Común de las Competencias Digitales Docentes (MCCDD) para tratar más en detalle qué es la competencia digital docente, para qué sirve y cuáles son las 21 habilidades digitales tecnológicas con las que todo maestro/profesor/pedagogo debe estar familiarizado y, por descontado, saber manejar.
La irrupción de la tecnología en los diferentes ámbitos de la sociedad ha supuesto un cambio notable para todos ellos, hasta tal punto que no hay ninguno en el que esta no se haya convertido en elemento clave.
En el caso del sector educativo, la tecnología ha contribuido a optimizar las tareas de organización y gestión en los centros educativos. Y no solo eso, además, ha ayudado a mejorar el aprendizaje en el aula, ampliando las vías de acceso al conocimiento y redefiniendo las metodologías educativas, haciéndolas más innovadoras y orientándolas hacia una enseñanza personalizada, adaptada a las preferencias y necesidades de cada estudiante.
Esto ha puesto de relieve lo importante que resulta que maestros, profesores y pedagogos cuenten con una competencia digital docente adecuada. En definitiva, que estén dotados del conjunto de conocimientos, aptitudes y actitudes imprescindibles para la utilización apropiada de medios digitales y tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en contextos y procedimientos educativos.
Por un lado, la competencia digital docente ha sido pensada para que maestros y profesores incorporen de manera natural la tecnología a su rutina diaria en el aula y, de paso, aprovechen todo su potencial, le saquen el máximo partido posible, para innovar en sus métodos pedagógicos y conseguir que los estudiantes alcancen un desarrollo integral (académico y personal).
Por el otro lado, también, para tener la capacidad suficiente como para enseñar a los alumnos a gestionar la información que hay en la Red con pensamiento crítico y, de paso, promover el uso ético, seguro e inclusivo de las tecnologías digitales.
El MCCDD, que comentábamos al inicio y que ya tratamos en otra publicación, surge de la necesidad de que el profesorado esté capacitado y acreditado para formar digitalmente a sus estudiantes, ya que la digital es una de las competencias clave de la LOMLOE.
Para ello, el Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y Formación del Profesorado (INTEF) elaboró este documento que, actualmente, organiza la competencia digital docente en 5 bloques o áreas. Y estas, a su vez, engloban 21 competencias digitales tecnológicas, tanto básicas como avanzadas.
La distribución queda de la siguiente manera:
Buscar información de relevancia, confiable y útil en Internet.
Comunicarse y relacionarse con otras personas a través de entornos digitales.
Crear y difundir contenidos multiformato.
Proteger el equipo y la identidad de uno mismo ante posibles acosos o prejuicios derivados del uso de Internet. Desarrollar conductas seguras en Internet.
Utilizar la tecnología para resolver situaciones problemáticas.
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